Índice. Pensamientos finales... 44

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1 Índice Hazte responsable de ti mismo... 9 Contribuye al éxito de los demás Los clientes primero Juega en equipo Ofrécete como voluntario... y muestra alguna iniciativa Acata las reglas Trabaja las horas por las que te pagan Supera las expectativas Cumple con tus compromisos Acepta los cambios Sé considerado con los demás No seas quejón ni transmitas negatividad Respeta y gánate el respeto de los demás Adopta la diversidad Continúa aprendiendo Pide comentarios que te realimenten Sé paciente Sé agradecido Piensa en la seguridad Piensa en la salud Luce tu mejor imagen Mantén informado al jefe Actúa como si fueras el dueño Concéntrate en las 2 grandes reglas Actúa con ética e integridad Cuán exitoso soy? Auto-evaluación Pensamientos finales

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3 Hazte responsable de ti mismo S i fueras como la mayoría de los adolescentes, estarías ansioso por ser más grande. Seguro que querrías tener la libertad y los privilegios que tienen los adultos lo más rápido posible. Trátame como adulto, Déjame entrar y salir cuando tengo ganas y Tienes que dejarme tomar mis propias decisiones eran quizás algunos de tus reclamos. No es cierto? Seguro! Es natural.y esto es seguramente lo que pasó después: Creciste (al menos en edad) y te diste cuenta de que junto con esas libertades y privilegios venían miles de responsabilidades. Había más reglas que cumplir, no menos. De repente, el resto del mundo (en lugar de las personas que te habían criado) te hacía Y TODAVÍA TE HACE RESPONSABLE de tu comportamiento y de tus decisiones. Te voy a dar una primicia: Salvo que alguien te ponga una pistola en la cabeza, todo lo que hagas en la vida es tu elección. Y eso se aplica especialmente al trabajo. Tú decides cómo comportarte; tú decides cómo tratar a los demás; tú eliges tu actitud y cómo responder al estrés yalaadversidad; tú decides qué nivel de honestidad y de integridad vas a mostrar. Finalmente, tú decides si tomas tu responsabilidad personal en serio o la evades como un flojo. Lo importante a recordar es que cada decisión que tomas (tomamos) tiene sus consecuencias. Las malas decisiones tienen malas repercusiones. Y culpar a los demás por tus malas decisiones es una pérdida de tiempo. La mentalidad de víctima en eso de que la culpa es de otro no conduce a nada. Quieres tener éxito de verdad? Responsabilízate de ti mismo y de tus decisiones. Y elige bien. Eres lo que eliges ser! 9

4 Contribuye al éxito de los demás I magina esto: Te estás esforzando por terminar tu trabajo. Tienes a tu lado un compañero con algo de tiempo libre y con conocimientos y destrezas para ayudarte. Te dices a ti mismo: No es necesario que me ayude. Su trabajo no consiste en ayudarme a hacer el mío? O más bien piensas lo siguiente: : Se da cuenta de que me estoy atrasando. Debería ofrecer ayuda para sacarme del apuro? Sin duda, pensarás esto último y estarás deseando y quizás esperando un poco de ayuda. Después de todo, todos pertenecemos al mismo equipo de trabajo, todos estamos juntos en esto y ayudar a un compañero de trabajo significa finalmente prestar un servicio al cliente y para eso trabajamos, verdad? Sí, exactamente! Ahora invierte la historia. Tú eres el que tiene la destreza para ayudar y tienes a tu lado a un compañero de trabajo que está luchando. Qué es lo más probable que hagas? Responde honestamente. Es más probable que ofrezcas ayudarlo o que mires para otro lado? Es muy probable que tu primer impulso sea ayudarlo. Y si ése es el caso, eres parte del equipo, y ésa es una de las características clave de un trabajador exitoso. Felicitaciones! Y si quieres que reparen en ti, que te aprecien y tal vez que te asciendan, busca la oportunidad de contribuir al éxito de las personas que te rodean. Comparte tu talento y tu tiempo para ayudar a los demás a aprender, a crecer y a resolver situaciones difíciles. Asegúrate de que ayudar a los demás no te impida terminar tu propio trabajo. A propósito, si eres el tipo de persona que mira para otro lado cuando alguien necesita ayuda, empieza a pensar en cambiar de hábitos o por lo menos, ajústate el cinturón, porque el que la hace la paga. Y de esa forma estarás siendo merecedor de toda la ayuda que te nieguen. 10

5 Los clientes primero U bícate por un momento en el lugar de tu cliente y reflexiona. Has estado alguna vez en algún negocio, esperando ser atendido, mientras la persona que se supone debe atenderte termina una tarea administrativa, hace una llamada telefónica o alguna otra actividad; o pero aún, está conversando con algún compañero de trabajo? Si has experimentado esto, sabes lo frustrante que resulta. Para ese empleado su tarea es más importante que atenderte. La persona que espera no debe estar esperando. Y la frase En un momento lo atiendo no acorta la espera. Este es sólo un ejemplo de los tantos donde la gente del negocio no se da cuenta de que el cliente está primero. Y si tu intención es triunfar laboralmente, es mejor que no caigas en la misma trampa. Quizá estés pensando: No es mi caso Yo no tengo un contacto directo con nuestros clientes. Piénsalo nuevamente! Lo cierto es que TODOS tenemos clientes: ya se trate del público en general que es cliente del negocio o de otros empleados dentro de tu empresa a los cuales prestas servicios. Tu trabajo existe porque existen esos clientes. No atenderlos bien, anteponer tus necesidades a las de ellos, dará como resultado que pueden llevar su negocio a otra parte. Y entonces, quizás esa otra parte sea el lugar donde tú estarás trabajando. Nada bueno! Recuerda: La única razón por la cual un cliente debe esperar a ser atendido es porque tú estás atendiendo a otro cliente. Y aún así, el cliente no debería esperar demasiado. 11