MEMORÁNDUM DE ENTENDIMIENTO

Transcripción

1 MEMORÁNDUM DE ENTENDIMIENTO En Ginebra, a los 14 días del mes de junio de 2004, el Ministro de Trabajo, Empleo y Seguridad Social Dr. Carlos Tomada, el Director General de la OIT, Sr. Juan Somavía y los representantes argentinos ante el Consejo de Administración de la OIT, por los empleadores Sr. Daniel Funes de Rioja y por los trabajadores, Sr. Rodolfo Daer. Recordando que en diciembre de 2002 la OIT, el Gobierno Argentino y los representantes de las organizaciones de trabajadores y de empleadores elegidos a el Consejo de Administración firmaron el Memorándum de Entendimiento para la elaboración e implementación en la República Argentina del Programa Nacional de Trabajo Decente. Teniendo en cuenta que en octubre de 2003 el Gobierno Argentino incluyó entre los Objetivos de Desarrollo del Milenio Promover el Trabajo Decente, fijando metas específicas a alcanzar en el mediano plazo. Tomando en consideración que en marzo de 2004 se sancionó la ley de Ordenamiento laboral N 25877, la que dispone que El Ministerio de Trabajo, Empleo y Seguridad Social promoverá la inclusión del concepto de trabajo decente en las políticas públicas nacionales, provinciales y municipales. Tomando también en consideración, que la OIT presta cooperación técnica a la consecución de ese objetivo a través de sus programas regulares y de dos proyectos específicos. Declaran que, en concordancia con el mandato legal mencionado y el acuerdo del Gobierno Argentino y los representantes de empleadores y trabajadores, reiteran su decisión de ejecutar un Programa Nacional de Trabajo Decente, cuyos antecedentes y lineamientos se detallan en el Anexo 1 y la OIT se compromete a apoyarlo técnicamente y en la movilización de recursos. Sr. Carlos Tomada Ministro de Trabajo, Empleo y Seguridad Social Sr. Juan Somavia Director General Oficina Internacional del Trabajo Dr. Daniel Funes de Rioja Representante de los Empleadores De Argentina en la OIT Sr. Rodolfo Daer Secretario General de la Confederación General del Trabajo de Argentina (CGT)

2 ANEXO 1 Antecedentes: 1. La crisis en Argentina ha provocado niveles de desempleo y una incidencia de pobreza e indigencia anteriormente desconocidos. Desde al año 2002, la OIT ha estado brindando apoyo a sus constituyentes nacionales, en particular al Ministerio de Trabajo, Empleo y de Seguridad Social (MTESS) para afrontar los impactos a través del proyecto Enfrentando los retos al trabajo decente en la crisis argentina (proyecto CRISIS ) financiado con recursos del excedente presupuestario de la OIT. 2. La experiencia por la que ha pasado la Argentina en materia de empleo así como de nivel y distribución del ingreso en los últimos 15 años ilustra tanto los profundos impactos sociales de la globalización y las políticas económicas de ajuste estructural, como los límites de la política laboral y de empleo para amortiguar tales impactos. A los años de fuerte crecimiento económico que generaron pocos empleos, siguió el colapso del mercado de trabajo durante la crisis. Ahora, en el proceso de recuperación, el país está aplicando un conjunto de políticas para mantener un alto ritmo de crecimiento a pesar de las limitaciones del contexto y, al mismo tiempo, seguir bajando los aún elevados niveles de desempleo y pobreza. En el último trimestre del 2003, la tasa de desocupación alcanzó el 14.5 por ciento y la incidencia de la pobreza fue de un 47.8 por ciento. Es en esta situación que el Ministro del Trabajo, Empleo y Seguridad Social solicitó la cooperación de la OIT para el diseño y ejecución de un Programa Nacional de Trabajo Decente. 3. Esta solicitud coincide con la transformación que la OIT está dando a la cooperación con sus países miembros. A partir del año 2004, la OIT basa su apoyo a los constituyentes nacionales en Programas Nacionales de Trabajo Decente, los que deben estar claramente vinculados a las prioridades nacionales de desarrollo y tener un enfoque temático. La coherencia e integración de la acción debería conducir a los impactos esperados. De conformidad con la programación por objetivos de la OIT, los programas nacionales comprenden indicadores de éxito y estipulan los productos, actividades, insumos y plazos correspondientes. El presente documento propone un programa con esas características en función de las prioridades y modalidades identificadas por los constituyentes argentinos. 4. El programa responderá también a las conclusiones y recomendaciones de la Comisión Mundial sobre la Dimensión Social de la Globalización, por lo que constituirá una contribución de significación al seguimiento del trabajo de la Comisión por parte de los constituyentes nacionales y la OIT. Prioridad nacional de desarrollo: 5. A diferencia de otros países, en la Argentina el trabajo decente es una prioridad nacional establecida. La Ley N (Ordenación del Régimen Laboral de marzo de 2004) dispone que el Ministerio de Trabajo, Empleo y Seguridad Social debe promover la inclusión del concepto de trabajo decente en las políticas nacionales, provinciales y municipales. En octubre del 2003, al adoptar los Objetivos del Milenio

3 se incluyó la promoción del trabajo decente como objetivo número 3. Las metas a alcanzar en el año 2015 son: desempleo debajo del 10% ; cobertura de la protección social de dos tercios de la población activa erradicación del trabajo infantil. Cabe señalar que el objetivo 4: Promover la igualdad de género está principalmente definido en términos de trabajo decente: más participación económica de la mujer, reducción de la brecha salarial y participación en niveles decisorios. Debe señalarse el antecedente del Memorandum de Entendimiento firmado entre OIT y los actores sociales el 11 de diciembre de Papel del trabajo decente: 6. La meta de un trabajo formal con cobertura de seguridad social es una aspiración mayoritaria de los argentinos. Esta meta, al mismo tiempo podría contribuir tanto a una mejor distribución del ingreso como a la promoción de la igualdad de oportunidades entre hombres y mujeres. En sentido coincidente, la erradicación del trabajo infantil reafirma la voluntad de proteger a las futuras generaciones. 7. Como lo demuestra la historia social y económica reciente del país, el trabajo decente debería ser planteado como meta a la hora de adoptar políticas macroeconómicas y sociales. Esto requiere una articulación explícita entre las políticas económicas, las laborales y las sociales (educativas, de protección social y de salud) 8. Además del papel fundamental que cumplen las políticas mencionadas en la creación y mantenimiento del empleo, las estrategias, programas y actividades del Ministerio de Trabajo, Empleo y Seguridad Social tienen una función decisiva. Esto hace necesario una optimización de las políticas activas de empleo y formación, de regularización del trabajo y de mejora de sus condiciones y una mayor equidad en la distribución del ingreso y de la política salarial 9. El diálogo social a distintos niveles deberá contribuir de manera significativa a la adopción e implementación exitosa de políticas coherentes. 10. Impactos esperados: En este contexto los impactos esperados y los objetivos inmediatos del programa respecto a los constituyentes nacionales, en particular al MTESS, se pueden identificar como sigue: 1. Fortalecimiento de las capacidades nacionales para diseñar e implementar políticas y monitorear sus impactos. 2. Formulación, adopción y ejecución de políticas integradas, teniendo en cuenta ex-ante sus impactos probables y el monitoreo de la calidad y cantidad del empleo, así como en la distribución y estabilidad de los ingresos. 3. Mejorar la eficacia de las políticas del Ministerio mediante el fortalecimiento de las instituciones, de las estructuras y de los procedimientos adecuados

4 Enfoque y estrategia del programa: 12. El alcance de estos objetivos por parte de los actores nacionales puede ser apoyado de forma efectiva por un programa nacional con las siguientes características : Enfoque: El programa se basará sobre dos ejes principales. El primero se define por la necesidad de la integración de otras áreas de políticas con las laborales y de empleo. El segundo toma en cuenta las políticas y programas que dependen del propio Ministerio o de sus estructuras descentralizadas. Primer eje: Integración de políticas laborales y de empleo con otras políticas de impacto sobre la cantidad y la calidad de los puestos de trabajo. La experiencia del crecimiento sin empleo antes de la crisis, su impacto, y las necesidades de la recuperación económica y social indican la necesidad de una integración institucionalizada de las políticas relevantes, basada en la evaluación de los riesgos que involucran y de las oportunidades que abren para el empleo. Las áreas de política que inciden son las económicas (monetarias, fiscales, cambiarias, industriales y comerciales) y las sociales (educación, protección social y salud). Segundo eje: Integración de las políticas del Ministerio en áreas prioritarias tendientes a la operacionalizacion de estrategias de manera descentralizada: 1. Políticas activas de empleo y formación. Esto incluye la transformación de los programas de empleo transitorio en otros de reinserción laboral, y en el mediano plazo, la instrumentación de políticas activas de empleo dirigidas a sectores vulnerables. 2. Políticas de regularización del trabajo no registrado y de mejora de las condiciones de trabajo. Diseño y ejecución de estrategias tendientes a la formalización de las distintas formas de trabajo no registrado y la elaboración de estrategias dirigidas al mejoramiento de las condiciones de trabajo. 3. Programa Nacional de Erradicación del Trabajo Infantil. Coordinación y ejecución de acciones tendientes a la detección, cuantificación y erradicación del trabajo infantil. 4. Políticas para la mejora de los ingresos del trabajo. Fortalecimiento de la negociación colectiva, evaluación del impacto del incremento del salario mínimo y estrategias tendientes a una mejor distribución del ingreso. 5. Políticas para la extensión de la cobertura del sistema de protección social. Estrategias tendientes a la adecuación del sistema de seguridad social y la ampliación de la cobertura del seguro de desempleo. 15. Estrategia: El Programa contará con la participación activa de los actores sociales a nivel nacional, regional, provincial y municipal y se apoyará en la extensa red de

5 técnicos nacionales competentes, como los movilizados por los Proyectos CRISIS, ÁREA y la Red Universitaria de Diálogo Social. La OIT brindará cooperación técnica directa con productos, metas e impactos concretos especificados conjuntamente con el MTESS. La OIT colaborara con los esfuerzos de los constituyentes argentinos mediante su apoyo técnico. 16. Movilización de recursos: Los recursos humanos y financieros necesarios para alcanzar los impactos esperados provienen principalmente de los actores nacionales, sobre todo del Gobierno. Los recursos financieros que puede aportar la OIT son relativamente modestos. No obstante, como lo demuestran los proyectos en ejecución en el país, la OIT puede jugar un papel importante en la movilización de recursos externos adicionales, dentro del marco permitido por sus regulaciones, reglas y directivas. En los últimos tiempos, la cooperación de la OIT con la Argentina se ha ido concentrando progresivamente en temas vinculados con la superación de la crisis económica y social. El Programa Nacional de Trabajo Decente asegurará la cooperación en curso. Duración 17. Un programa con la amplitud como el que se proyecta prevé lograr sus objetivos en el mediano y largo plazo. En tanto que el programa y presupuesto de la OIT es bienal, la cooperación con el Programa tendrá, en principio, una duración de tres años y medio (julio diciembre 2007), en dos fases. 18. Gestión: Aprovechando la experiencia del Proyecto Enfrentando los retos del Trabajo decente en la crisis argentina se adoptará una estructura de gestión similar. Actividades inmediatas. 1. Inicio del programa con talleres técnicos para definición de prioridades, indicadores, productos e insumos, que culmina con la elaboración de un plan de trabajo (agosto 2004) 2. Aprobación del plan de trabajo y comienzo de ejecución: septiembre / octubre del 2004.